Miscelánea

¿Cuál es la verdad de la milanesa?

Desde el 2012, el 3 de mayo fue la fecha que marcó en los calendarios el Día de la Milanesa. Las razones detrás de esta elección fueron puramente el azar y la pasión de los argentinos que impulsaron que la “milanesa” tuviera su propio día.

De más está decir que sus orígenes no se encuentran de este lado del charco, pero que gracias a la inmigración europea del siglo XIX llegó para quedarse, no sólo en Argentina, sino también en Uruguay, Paraguay y Bolivia.

Aunque su nombre en español nos señala a la ciudad de Milán como su cuna, hay quienes aseguran que su nacimiento fue en Viena. Las disputas, hasta el día de la fecha, no fueron resultas.

Pietro Sorba, un experto en el tema, relata que en un menú del año 1334 se hace mención a un plato llamado “lombolos cum panitio”. De acuerdo a los estudiosos de la materia, “lumbus” en latín significa carne de lomo y “panitio” remite al pan. El 17 de marzo de 2008, la municipalidad de Milán utiliza este texto para fundamentar otorgarle a la milanesa el estatus de Patrimonio Oficial de la Ciudad.

La otra versión, que la sitúa a Viena en su creación justifica la entrada de este plato a Italia como consecuencia de las sucesivas invasiones austríacas de la segunda mitad del siglo XIX sobre el norte de Italia.
De hecho, en Austria se la conoce como Wiener Schnitzel (filete al estilo de Viena) y es uno de sus platos emblemáticos.

Históricamente en nuestro país, la milanesa estaba reservada a las clases altas argentinas y luego alcanza su grado de popularidad gracias a la expansión de los restaurantes. Sarmiento, tan importante para la cultura gastronómica y enológica nacional, fue quien sugiere reemplazar la papa o la calabaza con la que generalmente se la acompañaba por una ensalada.

Hace unas semanas, Taste Atlas (reconocida revista especializada en viajes culinarios) destacó a la milanesa como la mejor “chuleta” empanada del mundo, luego de haber relevado diversas de carnes rebozadas a lo largo del globo. Según sus propias palabras: “A menudo conocida como el plato nacional no oficial de Argentina, la milanesa es una comida humilde, pero deliciosa que consiste en una rebanada de carne de res empanada que se fríe en aceite caliente y se enrosca mientras se cocina, debido a que los cortes de carne elegidos tienen menos grasa y tendones que otros cortes. La milanesa comparte muchas similitudes con el Wiener schnitzel austriaco y el filete de pollo frito americano. Sin embargo, la milanesa tiene sus raíces en Italia, y el plato original se remonta a la ciudad de Milán y la famosa cotoletta alla milanese”.

La milanesa a la napolitana es directamente considerada por Taste Atlas como “un plato tradicional argentino originario de Buenos Aires. Consiste en un bistec a la milanesa que se empaniza, se fríe y luego se cubre con una rebana de jamón, salsa de tomate picante, rebanadas gruesas de mozzarella, que se derretirán debajo de la parrilla”.

Fritas o al horno. Fría o caliente. Al plato o con pan. De carne o de pollo. A la napolitana o a caballo. Con papas fritas o con puré…no importa cómo se la disfrute, la milanesa es uno de los platos indiscutidos de la gastronomía argentina!