Miscelánea Productos y Productores

La Rioja presentó su propia “Ruta del Olivo” la cual busca revalorizar la variedad Arauco, única en nuestro país.

El objetivo fundamental del proyecto es potenciar y reivindicar 400 años de historia y producción, articulando la industria olivícola con la de servicios.

Mendoza, San Juan y hasta Córdoba, son otras provincias con gran tradición olivícola. Sin embargo, La Rioja es la principal productora y exportadora de aceitunas de mesa y de aceite de oliva.   

Los principales aceituneros están cerca de la capital provincial, pero sobre todo en las localidades de Chilecito y Aimogasta, donde comenzó la historia de la industria olivícola nacional: allí se encuentra el olivo más antiguo del país con más de cuatrocientos años de vida. Este árbol fue declarado Monumento Nacional e introducido por el capitán Pedro de Alvarado, considerado como el padre fundador de la olivicultura; fue el único que sobrevivió a la tala masiva ordenada en toda América por el rey español Carlos III en el siglo XVIII, y a partir de éste se volvió a construir esta industria.

La variedad Arauco, única en nuestro país, es producida en la zona con su mismo nombre; parte del proyecto busca lograr la Denominación de Origen o Indicación Geográfica para esta variedad.

Rubén Galleguillo, ha sido uno de los personajes fundamentales para lograr la creación de la denominada “Ruta del Olivo”, un recorrido que propone a los visitantes conocer “no solo el acervo cultural sino también la potencialidad productiva de la provincia. Alrededor de esta actividad se generan una serie de servicio conexos que están muy ligados con el turismo, que es un sector que nosotros queremos potencia a partir de esta estrategia. La estrategia es de visibilización, pero también de puesta en valor y de diferenciación. Tiene que concluir en colocar a la Rioja dentro de las principales atracciones a nivel turístico y a nivel productivo que tiene el país”, explica el ministro de Planeamiento e Industria de La Rioja.